Un valor que
nos ayuda a ser una mejor sociedad y que no solamente
debe vivirse en casos de desastre y emergencia.
Pensamos en la Solidaridad como una actitud que debemos
asumir en emergencias y desastres, sin embargo, la
Solidaridad es una característica de la sociabilidad que
inclina al hombre a sentirse unido a sus semejantes y a
la cooperación con ellos.
Podemos manifestar esta unión y cooperación, cada vez
que procuramos el bienestar de los demás, participando
en iniciativas que nos impulsen a servirles, como puede
haciendo colectas de ropa y alimentos para los más
necesitados, en los momentos que auxiliamos a quienes
son víctimas de alguna catástrofe o emergencia, es
decir, prestando nuestra ayuda en la creación de mejores
condiciones de vida.
No podemos reducir el concepto de Solidaridad a un
simple servicio extraordinario; el término "servicio",
puede hacernos perder de vista otros aspectos de la
Solidaridad:
-
En la empresa los dueños deben procurar pagar
un salario justo a sus trabajadores; también los
trabajadores, deben preocuparse por ayudar a sus
colegas a desempeñar mejor su labor.
-
En el trabajo personal: poniendo alegría y
empeño por hacerlo lo mejor posible, pues garantiza el
progreso de la empresa y por consiguiente el propio.
-
Los educadores actualizando continuamente sus
conocimientos, al mismo tiempo que las técnicas de
enseñanza, para garantizar un mejor aprendizaje y
aprovechamiento de los alumnos, además de ver en cada
educando a una persona en desarrollo y formación.
-
En el hogar: dando un trato justo a los
empleados que conviven diariamente con nosotros y nos
ayudan a tener una vida más agradable.
-
El respetar las normas de vialidad al ir
conduciendo, para garantizar la seguridad de los
peatones y automovilistas.
La solidaridad es la ayuda mutua que debe existir
entre las personas, no porque se les conozca, simplemente porque todos tenemos el
deber de ayudar al prójimo y el derecho a recibir la
ayuda de nuestros semejantes.
Si queremos que algo mejore debemos decidirnos a
tomar el problema en nuestras manos, tal vez el vecino
tiene la misma inquietud, y sólo le hacia falta con
quien empezar a trabajar, con sus medios y los
nuestros... no esperemos que las cosas cambien por sí
mismas.
En resumidas cuentas, para vivir la Solidaridad se
requiere pensar en los demás como si fuera otro yo, pues
no vivimos aislados y nuestros conciudadanos esperan que
alguien se preocupe por el bienestar y seguridad de
todos, tal vez de alguien como nosotros, como líderes
emprendedores.
Tomado de www.encuentra.com |