"Lo
único que tienes que hacer es devolver este favor a otra
persona que lo necesite"
Por Mariel Sarai Martínez Dueñas, Pedagoga por la
Universidad Panamericana
Esa era la filosofía de la cadena de favores que
proponía un niño en una película del mismo nombre, que
si no has visto, es ampliamente recomendable.
Hacer un favor a otros, es en verdad una oportunidad
para devolver lo que tanta gente cada día hace por ti,
una forma interesante de devolver estos favores es por
medio de las labores sociales.
Una labor social, no es pura filantropía, es decir no es
simplemente "ayudar a otros por lo buena persona que
soy", hacer labores sociales va mucho más allá, pues
demanda generosidad y amor por los demás, por que exige
tiempo, esfuerzo y muchas veces (las menos) también
dinero, y generalmente lo único que se recibe es una
sonrisa, que es el valor más importante.
Existen diferentes formas en que tú como persona puedes
contribuir a las labores sociales, una forma muy
concreta y profesional es a través de los voluntariados,
que son grupos de personas que ayudan a los más
necesitados (enfermos, pobres, gente en situación de
calle, marginados, etc.) ya sea visitándolos, haciendo
donaciones, etcétera, sin embargo, lo más importante de
esta cadena de favores es ayudar a la gente a que salga
de su situación de marginación para que pueda ayudar a
otros.
Ahora bien, a veces no tenemos tiempo para integrarnos a
este tipo de labores altruistas, sin embargo podemos ser
parte activa de la cadena de favores, cuando escuchamos
a un amigo, compartimos nuestra comida con algún niño
que nos limpia el parabrisas, devolvemos una sonrisa a
un payasito de la esquina, colaboramos en las labores de
nuestra casa, o participamos en un foro de ayuda como
este, en fin... la cadena de favores, no es exclusiva
de una situación determinada, más bien es una decisión
personal por contribuir a la mejora social y por ende
personal. |