Entre padres e hijos:
La
comunicación, consejos para mejorarla.
Le dices
“papá”, y él riéndose y ofreciéndote los brazos, te
contesta “pa pá”. Años después le dices “ordena tu
cuarto”, y al rato te lo encuentras mirando la tele con
la habitación hecha un desastre. Le dices “a las nueve
en casa”, y el enano te responde que eres un “tirano”
que “coartas” su libertad.
¿Es el español igual para padres e hijos?
Mientras la Real Academia no saque dos diccionarios
habrá que pensar que sí. Padres e hijos tenemos muy
distintas experiencias, lo que hace que ante una misma
situación nuestras cabezas nos lleven a pensar cosas muy
diferentes. Si la vida es distinta “según el color del
cristal con que se mire”, no hace falta recordar que
nuestro cristal, es bastante diferente al de un
adolescente.
El
caso es, que ahora precisamente la persona que más
nos importa crece con la cabeza en ese mundo de música,
videojuegos y risas mientras que nosotros pensamos en
responsabilidades, obligaciones, facturas, problemas...
Eso nos hace creer que lo que le pasa o lo que
intenta decirnos sea a veces como tratar de entender
chino. Y sin embargo...
La soledad y la incomprensión es la raíz de la mayoría
de los problemas con los chicos.
Cuando no nos sentimos en contacto con quienes nos
rodean, podemos perdernos. Si esos comportamientos
“infantiles” los tenemos los adultos, ¿cómo no van a
pasarlos nuestros hijos? Para que ese sentimiento de
incomprensión no se meta en nuestro hijo, tenemos que
rodearle de un ambiente adecuado, un ambiente del cual
nosotros, los padres, somos parte esencial.
Las
siguientes recomendaciones son para mejorar la
comunicación con tu adolescente:
·
Fíjate en la manera que tienes de escuchar a tu hijo.
A veces viene a decirnos algo absurdo para nosotros pero
importantísimo para él, tal vez estemos ocupados pero
debemos evitar que tenga la impresión de que sus cosas
“super importantes” no te interesan, detén un momento lo
que estabas haciendo y espera a que él termine de
hablar, y si estás muy ocupado(a) hazle saber que tiene
que esperar, pero díselo con cariño. Cuéntale que te
gustará mucho escuchar eso más tarde, pero que te tiene
que ayudar esperándose un poco.
·
Analiza los momentos que tienes al día para estar juntos
y si estás aprovechándolos todo lo posible para
conversar.
Hablen de cualquier cosa, de tus problemas, de lo que te
gusta, de lo que le gusta a él(ella) así se conocerán
mejor y será más fácil transmitirle tu manera de ver y
entender el mundo. Puedes aprovechas el momento de la
comida para esto.
·
Evita traerte el mal humor a casa.
Los
hijos, sobre todo los más pequeños tienden a
contagiarse de nuestro humor, detente en la puerta de tu
hogar, deja los problemas afuera, entra y disfruta a tu
familia.
·
Cuando acabes una conversación, cerciórate que estas
dando a entender lo que deseas y si tu hijo te
interrumpe, debes enseñarle con cariño pero con firmeza,
que eso no se hace.
·
En
cualquier caso no te quedes en la superficie de las
palabras, pues más allá de su significado, detrás
siempre hay un sentimiento y un estado de ánimo que
también tienes que intentar percibir. A veces cuando
decimos “hola” estamos tratando de expresarle a la otra
persona “me gustaría hablar contigo”. Fíjate en el tono
de su voz, en la gravedad que puede tener lo que te
cuenta. ¿Cómo se comporta cuando está preocupado? ¿Esta
buscando la conversación? ¿se calla? ¿habla sin parar de
cosas sin importancia?
Estos son algunos tips que te podrán ayudar a mantener
una mejor comunicación con tus hijos adolescentes pero
sobre todo hazles sentir cuanto los amas y lo
importantes que son ellos para ti, después, todo lo
demás será más sencillo. |