“Yo puedo hacer lo que tu no puedes, tú puedes hacer lo que yo no puedo, juntos podemos hacer algo hermoso para Dios” Madre Teresa de Calcuta   Si Necesitas alguna ayuda urgente, comunicate con nosotros    ayuda@emergencia.org.mx

            

www.emergencia.org.mx           Dic. 17, 2007    Boletín No. 455


 

 

 

 

Mi familia ha llegado. Parte II

Colaboración: Ma. Del Rosario H. de Villarreal

Cuando salí me esperaban dos de mis amigos a los que les comenté lo que habría de hacer esa noche. Mis amigos me dijeron, que al menos brindara con ellos antes para que así ellos sintieran que estaba ahí en el grupo.

Ese brindis se alargó hasta casi antes de la media noche, tiempo en el cual, pensé muchas veces que en mi casa habrían de estar mis hermanos y hermanas con mis padres y yo, acá sin cumplir lo que había prometido a mis hermanos sobre esa noche. Ya un tanto arrepentido por no haberme ido de inmediato, me retiré sin avisarles, presentía que iba a recibir un buen regaño por parte de mis hermanos y ver el rostro de mis padres, enojados conmigo.

Cuando iba llegando a casa, no percibí alboroto alguno de parte de mi familia, pensé que por estar fría la noche se encontrarían en el interior de la casa con mis padres. Entre por la puerta de atrás para no ser tan obvio, al menos si me preguntaban diría que estaba dormido, así que no habría ningún problema.

En verdad, ahora que lo recuerdo, una lágrima se desborda de mis pupilas.

Cuando abrí la puerta no oí ningún ruido solo escuché la conversación de mi padre con una voz quebrada por el llanto diciéndole a mi madre. " Vieja, no vino nadie, ni siquiera el menor de mi hijos está con nosotros, ¿qué hemos hecho con nuestros hijos, que ahora no quieren estar aquí?  Se Oía una onda tristeza en estas palabras, que no tuve valor ni siquiera para acercarme.

Seguí escuchando y mi madre le contestó con unas palabras que aún retumban en mis oídos.

"Viejo: los padres estamos en el pensamiento de los hijos cuando están pequeños, pero cuando crecen, ese pensamiento lo ocupan sus propios hijos, sus ocupaciones, sus amistades, otras cosas. ¿Tú crees que preferirían pasar la noche de fin de año con un par de viejos que ya no pueden bailar, que no pueden desvelarse como lo hacían antes? Mira, voy a poner los 10 platos sobre la mesa, y el que vaya llegando le iremos sirviendo".  

Sentí un nudo en la garganta tan grande que no me dejaba respirar, me sentí tan desgraciado, tan mal hijo. Salí de donde estaba y abracé a mi padre y le pedí perdón, luego fui con mi madre, y le besé sus manos y me arrodillé, ella me besaba los cabellos mientras mi padre se secaba las lagrimas y dándome la mano me sentó a su derecha y dijo: No es necesario que estén todos, uno solo representa a los demás. “¡Vieja, sirve la cena que mi familia ha llegado! “

Hoy mis hijos no están conmigo y en mi mesa están los 2 platos servidos, en cuanto llegue uno, mi familia habrá llegado...

¡Aprovechemos a nuestros padres en vida! No los descuidemos que cuando no los tengamos físicamente desearemos un solo minuto para poder abrazarlos y decirles cuanto los amamos.

" Sólo viviré una vez ... Por lo tanto cuanto bien haga y cuanta bondad pueda mostrar a otro ser humano, he de hacerlo ahora ... No he de aplazarlo u olvidarlo ... pues no volveré a pasar por aquí "

 Madre Teresa de Calcuta

     Lic. Rosa Elena Ponce V. 

Brinco al inicio

 

PARA CUALQUIER EMERGENCIA

Esto es un Servicio Social, No tiene ningún costo para ti

Escribe a   ayuda@emergencia.org.mx   o  visítanos en:

Trasviña y Retes No. 3701-D

Col. San Felipe   Chihuahua, Chih.   C.P. 31240

Tels. (01-614) 413-0262 y 413-4073

Alta     Baja     Histórico    Comentarios    Colaboraciones

 

 

 



Es usted el visitante No.