Consejos para los padres de un niño superdotado
-- No se dejen llevar por las primeras conclusiones y
comprueben que su hijo es superdotado: Tómense el tiempo
para pensar y observar en cualquier situación a su hijo.
A menudo se confunde el término superdotado con el
talento o la precocidad. Busquen a un profesional que le
haga un test de inteligencia. Existen diferentes pruebas
psicométricas para determinar el coeficiente intelectual
de acuerdo a la edad del niño.
-- Tomen conciencia: Es muy importante que sepan que la
deslumbrante inteligencia, puede acarrear una serie de
inconvenientes emocionales, sociales y escolares, de ahí
la importancia de apoyarse con gente conocedora en el
tema.
-- Bríndenle una educación de acuerdo a sus capacidades:
La tendencia al aislamiento de los superdotados es su
principal enemigo, así que con el fin de desarrollar al
máximo su potencial intelectual investiguen sobre
programas, escuelas y asociaciones especialmente
diseñadas para niños genios. Sin embargo, es también
conveniente que su hijo participe en actividades
normales donde aprenda a convivir con los demás.
-- Descubran las aptitudes e intereses especiales de su
hijo y motívenlo: Si ya conocen cuáles son las cosas que
le gustan, realicen actividades relacionadas y desde
luego que también se adapten a sus posibilidades
económicas.
-- Proporciónenle un ambiente adecuado: La genética
determina en gran medida la inteligencia, pero para que
ésta se desarrolle de manera adecuada, se requiere de un
ambiente favorable, por lo que los padres de un niño
superdotado deben ofrecerle un ambiente que motive sus
intereses y que esté lleno de amor, ternura y
comprensión.
-- Comunicación: La comunicación entre padres e hijos es
vital. Normalmente estos niños se enfrentan a muchas
dudas, temores y frustraciones. Escúchenlo y oriéntenlo.
-- Disciplina: Recuerden que aunque sea un genio, está
bajo su tutela. No teman disciplinarlo en amor y con
sabiduría.
-- El fracaso y la frustración: Las metas de un
superdotado tienden a ser excesivamente ambiciosas por
esa mayor capacidad de visión, pero muy a menudo los
recursos propios, el entorno, la sobrevaloración de las
propias capacidades y/o la falta de perseverancia por
aburrimiento, no le permiten alcanzarlas. Por lo tanto
hay que enseñarle a su hijo a superar esos sentimientos
y seguir adelante.
Tener un alto CI no es garantía de éxito en la vida,
únicamente es una gran herramienta para aprender, en
principio en la escuela, pero también para aprender a
relacionarse con los demás, a buscar y desarrollar los
mejores comportamientos, los mejores hábitos personales,
para llegar a tener una vida plena y feliz en sociedad.
Lic. Rosa Elena Ponce V. |