Los jóvenes lo único que necesitan, es que actuemos como
padres
Autor desconocido. Enviado por Cristina Ferrer a
Catholic Net
Bueno, pero... ¿Qué nos pasa? ¿Qué es lo que nos hace
suponer, que alguien más tiene la responsabilidad de
cuidar de nuestros hijos, si nosotros, que se supone que
somos los que más los amamos, no queremos tomar esa
responsabilidad?
Es
ridículo ver esas mesas redondas, en las cuales
funcionarios públicos, dueños de bares y discotecas,
miembros de comités ciudadanos y medios de comunicación
se culpan unos a otros por algo que no es más que falta
de responsabilidad de nosotros los padres.
Que
si en los bares le venden alcohol a menores; que si los
agentes de tránsito reciben sobornos, que si no cierran
estos lugares a la hora señalada...
¿Pero en dónde están los padres de éste menor que tomó
más de la cuenta?, ¿Quién lo recibe en su casa a esas
horas y en ese estado?, ¿Quién le dio el dinero para
entrar en el bar, para el alcohol y para el soborno? ,
¿Dónde están los padres que le dieron el carro a un
menor que no es capaz de hacerse responsable y maneja
aunque esté tomado?
¡Por
favor! En qué piensan los padres de esos jóvenes que
salen de su casa a las 11 de la noche, habiendo empezado
a tomar desde en la tarde, durante el partido de Tigres
contra Rayados?
¿Y
qué están pensando los padres de la jovencita de 16 ó 17
años, que va a conseguir “raid” de regreso con la mamá
de “fulanita”, sin querer enterarse de que esa mamá ni
siquiera está en la ciudad?
Por
qué queremos pasarles la responsabilidad de decidir en
manos de quién ponen su vida si todavía no son capaces
de decidir de que color pintarse el pelo, hoy con
rayitos, mañana mejor negro. Por qué les damos permiso a
nuestras hijas de irse a dormir después de la disco a
casa de una amiga y cargamos la responsabilidad de
llevarlas a los novios de 19, 20 años quién sabe a qué
hora y no sabemos ni cómo, pues puede ser que tome de
más ¿Por qué queremos creer que son maduros y
responsables si nosotros mismos no lo estamos siendo?
Nos
volvemos ciegos a los peligros por comodidad, nos
hacemos los "buena onda", "es que yo sí le tengo
confianza a mi hija". ¡Lo que tenemos es miedo, flojera,
no queremos actuar como padres!
Nuestros hijos no necesitan que seamos sus amigos...
Ellos ya tienen un montón de amigos, de su edad.
Nuestros hijos necesitan padres valientes y
responsables, que pongan reglas y luego estén ahí para
ver que se cumplan.
¿Cómo va a depender la seguridad de mi hijo del barman
de un antro o del agente de tránsito, o del dueño de la
disco si cumple la ley y cierra a las 2:00 a.m. en lugar
de a las 6:00 a.m.?
Yo
creo que sí debería haber una ley. Pero para los padres
de familia. Yo creo que sí debería de haber un horario,
pero el que los padres pongan en su casa
independientemente de la hora que cierren los antros.
¿De
qué tenemos miedo, papás? ¿Por qué no podemos poner
reglas? ¿Por qué no podemos exigir que se cumplan?
Si los jóvenes no
necesitaran guía, si no necesitaran límites, autoridad a
quién respetar... no existiríamos los padres.
Se
nos encomendó una misión muy especial, la más grande:
colaborar con Dios en
la
Creación
y es a nosotros a quien se nos pedirá cuentas por
nuestros hijos, no al dueño del bar, no al amigo de
nuestro hijo que iba conduciendo borracho cuando
chocaron, no al policía, no al maestro...¡a nadie más!
Nunca, nadie podrá hacer que nuestros hijos regresen a
casa a tiempo y a salvo, si nosotros no podemos hacerlo.
No existe ley, ni
horario, ni funcionario capaz de hacer por nuestros
hijos, lo que nosotros no queremos hacer: Actuar como
padres
Es
muy difícil claro, oír de ellos "Es que todos te tienen
miedo, papá", ¡Pues no importa! No estamos en campaña de
elecciones para el papá más popular del año, ya cada
quién tiene el padre que le tocó y sería estúpido poner
en peligro la seguridad de nuestros hijos por quedar
bien con sus amigos.
Es
terriblemente injusto, además, que estén en peligro
jóvenes que sí tienen reglas en su casa, que saben que
al llegar, estarán esperándolos sus padres, desvelados
pero contentos de saber que se divirtieron y orgullosos
de comprobar que van madurando y que actúan de acuerdo a
lo que se les está tratando de inculcar: Libertad con
Responsabilidad.
Es
horrible oír de muertes de muchachos así, que han tenido
la desgracia de toparse con esos otros jóvenes, hijos
"huérfanos" de padres "buena onda".
No
estaría mal, ganarnos el respeto de nuestros hijos,
tomando las riendas de su vida, haciéndonos responsables
de su hora de llegada, de lo que toman, de sus
calificaciones, haciéndoles saber lo que esperamos de
ellos y creando los medios para ayudarles en su lucha
para conseguirlo.
Pongamos los pies en la tierra, seamos concientes...Los
jóvenes lo único que necesitan, es que actuemos como
padres.
Lic. Rosa Elena Ponce V. |