Trinidad Aparicio Pérez . Psicóloga clínica.
3. Cómo llevarte bien con la
familia política
Lo ideal en toda pareja es una buena relación con ambas
familias, esto evitará problemas y discusiones entre
ustedes, para lograrlo es necesario tener una buena
disposición. A continuación exponemos una serie de
sugerencias:
-
Ante todo es necesario una actitud de respeto hacia
ellos, hacia sus costumbres y forma de vida, acéptalos
como son.
-
Trátalos con cariño y evita cualquier discusión o
roce, pero si alguien te ofende o falta el respeto,
debes hacerle entender que no se lo puedes permitir.
Si es necesario, háblalo con tu pareja para que trate
de solucionarlo.
-
Deja que tu pareja tenga una relación fluida y natural
con su familia sin que tú tengas que estar en todo
momento o tenga que contarte todo lo que hace con
ellos. Ten en cuenta que hay personas que tienen una
relación muy estrecha o de amistad con sus padres y
hermanos.
-
Muéstrate tal y como eres, no pretendas impresionarles
para lograr las expectativas que ellos tienen de una
nuera o yerno perfecto, no lo lograrás.
-
No compares tu familia con la de tu pareja. Ninguna es
mejor que la otra y, al fin y al cabo, te has
enamorado de una persona que ha sido educada y se ha
desarrollado con los valores y costumbres de tu
familia política.
4. La relación con la suegra
Una suegra discreta y cariñosa puede ser una gran ayuda
con los nietos
Es un estereotipo pensar en la suegra como una persona
manipuladora, entrometida y que todo lo controla y que
por lo tanto genera conflictos en la pareja. Es cierto
que esto ocurre en algunas ocasiones. En tal caso, si se
entromete en su vida o trata de controlarla deben
intentar no permitírselo desde el primer momento.
También ocurre que aquella madre que fue excesivamente
protectora con su hijo, como suegra no podrá evitar
seguir preocupándose y preguntándole continuamente por
su vida, consiguiendo de esta forma agobiar a la pareja.
Son aquellas suegras que no han sabido superar la
independencia de su hijo/a.
Con frecuencia se trata de mujeres que apoyan su
afectividad en el hijo en lugar de en su marido o
pareja, por ausencia o falta de apoyo de este, creando
una relación patológica con los hijos.
Por supuesto, también existe un tipo de suegra prudente
y discreta, que respeta a la pareja y no se inmiscuye en
su relación.
Al margen de los distintos tipos de suegras que hemos
señalado, hemos de destacar el papel tan importante que
desempeñan la mayoría de ellas cuando nacen los nietos,
dispuesta a quedarse con ellos y a ayudar cuando se le
necesita.
Lic. Rosa Elena Ponce V. |